El próximo domingo 24 de julio entra en vigor la Ley de Igualdad de Matrimonio en el Estado de Nueva York, tras su ratificación a finales del pasado mes de junio en el Senado neoyorkino. Desde entonces, se han recibido 2661 solicitudes de matrimonio en la ciudad, de las cuales 1728 correspondían a parejas del mismo sexo. El problema es que de ese montante, son 764 las parejas que quieren aprovechar el primer día de legalidad del matrimonio homosexual para casarse, que no quieren pasar un día más viviendo sin hacer oficial su amor, aprovechando que ese día las administraciones públicas harán una excepción y abrirán para poder casar a las parejas que así lo deseen.
Como ha comentado Michael Blumberg en una rueda de prensa, no existen funcionarios municipales suficientes en las cinco secretarías de la ciudad para casar a tal cantidad de parejas, por lo que han tenido que recurrir a un sorteo:
El método más justo para determinar quién tiene la posibilidad de casarse el domingo y garantizar que todos puedan planificar adecuadamente su propio gran día es a través de un sistema de sorteo ecuánime.
Las parejas que deseen casarse el próximo domingo tendrán que apuntarse en una lista que estará disponible hasta el jueves, y será el azar el que decida si pueden casarse o no el primer día.
La entrada en vigor de la Ley será un acontecimiento histórico, y no son pocos los que quieren hacer coincidir el día más feliz de su vida con el día en que la capital del mundo se convirtió en un Estado un poco más libre.
De hecho, parece que ya se sabe cuál será la primera pareja que se casará el domingo. Se trata de una pareja de lesbianas en la ciudad de Búfalo, la segunda ciudad más grande del Estado de Nueva York, que ha planeado una romántica boda en la medianoche del domingo, en la Isla de Luna a los pies de las Cataratas del Niágara.
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